Oscuros y controvertidos son los orígenes de este perro de rastro yugoslavo que muchos consideran como autóctono de aquella nación. Es posible teorizar al respecto diciendo que todas las razas de sabuesos de Europa oriental descienden de una única raíz que se remonta a los perros que los magiares llevaron consigo durante sus invasiones. En cada zona, por lo tanto, se fijaron diversos tipos, fruto de la selección del hombre y de una adaptación natural a las condiciones ambientales y climatológicas y a la utilización que se les dio durante siglos. Esta es una de las causas, entre otras, de la poca difusión de estas razas y también del Sabueso Posavatz, fuera de sus regiones.